Resulta curioso observar cómo cambian las tradiciones funerarias según la cultura. A lo largo del mundo las sociedades han desarrollado diferentes ritos para decir adiós a aquellos que se han marchado definitivamente. Aunque concebimos la muerte de un ser querido como algo triste, en muchos sitios la ceremonia funeraria es más bien un canto a la vida.
Cementerios verdes anglosajones: una novedad que podría convertirse en tradición
Los green burial son una tendencia que se ha puesto de moda en Estados Unidos y Reino Unido. Recogen la vieja costumbre de enterrar a las personas en un entorno totalmente natural, tal y como lo hacían nuestros antepasados.
Los cementerios verdes son, básicamente, bosques y fincas en los que se ha autorizado el enterramiento de seres humanos. Lo que se busca es unir el cuerpo con la naturaleza. De ahí que este no sea tratado al estilo tradicional con productos químicos.
En estos enterramientos el fallecido es depositado bajo tierra con un sencillo lienzo de fibra vegetal. En muchos casos no se instala una lápida ni ningún elemento que pueda recordarnos que allí hay una persona reposando para toda la eternidad.
El objetivo es conseguir una total comunión entre el ser humano y la naturaleza. Que el cuerpo, al descomponerse, aporte vida a los árboles y plantas que tiene a su alrededor.
En España la legislación sobre inhumaciones es bastante estricta, así que estos entierros no están permitidos.
Tradiciones funerarias según la cultura: curiosidades del mundo
La fiesta de la cremación de Bali
En la cultura balinesa lo habitual es incinerar los cuerpos. Lo curioso es que este momento se vive como algo digno de celebración y, mucho más, si el fallecido es una persona célebre. Forma parte de la religión Hindú, que aboga por la reencarnación.
Es por ello que los cuerpos deben incinerarse, porque esta es la única forma en que el alma puede liberarse y buscar así su nuevo destino.
Dado que para los hindúes el cuerpo físico es algo temporal y el alma sobrevive eternamente, la muerte no es un momento especialmente triste. Porque implica el comienzo de una nueva vida.
Lo habitual es que se incinere el cuerpo del fallecido en una gran ceremonia para la que la familia ahorra durante años. Se prepara una importante cantidad de comida y se invita a toda la comunidad. Momento que se aprovecha para recordar a quién ha muerto.
El cuerpo del difunto es bellamente adornado con flores y joyas, y los asistentes visten de un color u otro en función de su sexo y su estado civil. Tras la ceremonia, la familia guarda un luto de 10 días.
Funeral de Jazz en Nueva Orleans
Las tradiciones funerarias según la cultura pueden cambiar incluso dentro de un mismo país. Un claro ejemplo lo puedes encontrar en Nueva Orleans, en Estados Unidos.
Allí es común que el cortejo fúnebre incluya una banda de músicos de jazz. En un principio se tocan temas suaves y melancólicos, pero una vez que el cuerpo ha sido enterrado, se cambia el ritmo a uno mucho más alegre y optimista. Porque se entiende que la música es una forma de conmemorar la vida de quien ha muerto.
Esta curiosa tradición surgió como resultado de la unión de los ritos funerarios de África Occidental, la cultura francesa y la cultura afroamericana.
El giro de los huesos de Madagascar
En la cultura de esta isla la muerte no es algo definitivo. Los muertos deben regresar a la tierra de forma periódica para ver a su familia y seres queridos. La manera de ayudarles a que lo consigan es mediante la Famadihana o ceremonia del giro de los huesos.
En el momento del fallecimiento, el cortejo fúnebre es acompañado por una banda musical de mujeres, y se realiza uno de los caminos que la persona llevaba a cabo de forma habitual. Pasando por su lugar de trabajo, la casa de sus amigos, etc.
Cada cinco o siete años se desarrolla la ceremonia Famadihana, que consiste en abrir la tumba y extraer los huesos del difunto. De nuevo, la música es protagonista y las familias aprovechan para poner al día a sus seres queridos ya fallecidos de cómo les ha ido todo en ese tiempo.
Finalizada la ceremonia, los huesos vuelven a su lugar de descanso. Por lo menos durante unos años más.
Los ataúdes de fantasía de Ghana, una de las más originales tradiciones funerarias según la cultura
En nuestra cultura, los ataúdes son sobrios y elegantes, pero en Ghana lo que se estila es que el lugar de descanso eterno sea una auténtica fantasía.
Una de las grandes aspiraciones de los ghaneses es ser enterrados en un original ataúd que esté muy vinculado con su trabajo o con algo que les guste especialmente. Así, nos podemos encontrar con ataúdes con forma de coche y hasta de avión.
Esta tradición empieza a extenderse por todo el mundo, aunque adaptada a la cultura de cada lugar. De hecho, cada vez es más común que los ataúdes se personalicen según los gustos del difunto. Por ejemplo, con los colores de su equipo de fútbol.
Ritos funerarios de Filipinas
En Filipinas encontramos ritos funerarios muy diferentes según la región en la que nos encontremos. La etnia Caviteña «entierra» a sus fallecidos en troncos de árboles huecos. De hecho, lo normal es que cuando alguien enferma su familia empiece a buscar el árbol que le dará cobijo una vez muera.
Por su parte, la etnia Sagada cuelga los ataúdes en un acantilado. Porque entienden que esta es la forma más fácil de poner a sus seres queridos en un lugar que esté cerca del cielo. Además, es normal que los ancianos tallen sus propios ataúdes.
Las tradiciones funerarias según la cultura pueden resultarnos especialmente sorprendentes y curiosas. En cualquier caso, lo que todos tenemos en común en cualquier lugar del mundo, es nuestro deseo de despedirnos de la mejor forma posible de nuestros seres queridos.
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